La Municipalidad de San Luis realizó ante la Justicia provincial un pedido de prueba anticipada para constatar la cantidad y calidad de agua que reciben las tres plantas potabilizadoras de la ciudad. La medida fue comunicada en conferencia de prensa por Francisco Petrino, Secretario de Gobierno, e Ignacio Campos, Secretario Legal y Técnico.
“Estamos esperando a que prontamente se puedan hacer estas pericias, para que se instruya a la Provincia para que realice las acciones correctivas. Cuando el consumo de agua en la ciudad se incrementa, a las plantas potabilizadoras ingresan líquidos -agua cruda- de distintos sectores y eso impide el normal proceso de potabilización. Las plantas fueron diseñadas para procesar y potabilizar el agua que viene del dique La Florida. En épocas de alto consumo, la provincia inyecta agua de Río Grande o del dique Cruz de Piedra, imposibilita que las plantas tengan un normal funcionamiento”, dijo Francisco Petrino.
“Ellos han manifestado que la responsabilidad de realizar el proceso de potabilización es exclusiva de la Municipalidad. Nosotros coincidimos 100% pero ellos tienen la obligación de proveer el agua cruda según lo que establece la normativa vigente, y eso es lo que no se está cumpliendo”.
El Secretario Legal y Técnico, Ignacio Campos, brindó detalles técnicos acerca de las deficiencias advertidas por la Municipalidad y que dificultan el adecuado tratamiento del agua cruda que envía San Luis Agua. “Tenemos que tener presente que el acueducto de La Florida -único reservorio de agua de la provincia apto para consumo humano- fue construido hace muchísimos años. Hoy desde ese acueducto se está alimentando el consumo de agua de la ciudad de San Luis, Juana Koslay y La Punta. El acueducto de La Florida no puede transportar la cantidad de agua que las tres ciudades necesitan”.
“Entonces el Gobierno, para ayudar en el caudal de agua que transporta, ha conectado un acueducto que viene del dique Antonio Esteban Agüero de Río Grande. Este reservorio de agua no contiene agua apta para consumo humano porque no fue construido para eso. Con algunas deficiencias en la construcción o malos cálculos, se construyó de manera que la toma de agua para conducir por los acueductos está en la base, en el fondo del lago. Esto genera que no sólo en épocas de crecidas o aludes se transporte agua de mala calidad en cuanto a la turbidez, sino que siempre arrastre minerales que no son aptos para consumo humano”.
“Esto no es una novedad y fue advertido por la Municipalidad de San Luis y el Gobierno de la Provincia. Hace muchos años el gobierno desarrolló el Plan Maestro de Agua, y ahí estableció advertencia y se propuso como mejor acción posible construir un segundo acueducto desde el dique La Florida. Eso, a pesar de los años transcurridos, no se ha llevado a cabo y hoy no tiene un principio de solución la calidad ni la cantidad de agua que las tres ciudades están recibiendo”.
“Otra solución que hemos planteado y a la que el Gobierno no nos han dado respuesta, es cambiar el sistema de la toma de agua en el dique Esteban Agüero, es decir, elevarlo hacia los dos metros de la superficie que se requieren. Tampoco se ha llevado a cabo esta obra con lo cual, en lo inmediato, no advertimos una solución que de garantía de salubridad al agua”.
El secretario Campos aclaró que no se trata de una denuncia ante la Justicia sino de un pedido de prueba anticipada para “recolectar todos los elementos y en función de ellos, iniciar la o las acciones que resulten necesarias. Las pruebas anticipadas que se han pedido son, entre otras, una inspección ocular en todo el trazado del acueducto de La Florida a Los Puquios para constatar cuál es el elemento que genera que desde el dique La Florida salgan 900 litros por segundo y lleguen a Los Puquios 600 litros por segundo. Evidentemente el acueducto está roto o hay conexiones clandestinas, a sabiendas o no de la autoridad provincial”.
“Hemos pedido que se tomen muestras en las conexiones del acueducto que viene del dique Antonio Esteban Agüero e ingresa a La Florida para controlar no sólo la cantidad sino la calidad del agua que ingresa a ese acueducto. También pedimos toma de muestras en la entrada de todas las plantas potabilizadoras de la ciudad para constatar la cantidad y calidad de agua. Esto se va a llevar a cabo a través de distintas pericias -hidráulicas, químicas y bioquímicas- y las inspecciones oculares”.
“Una vez que tengamos todo este cúmulo probatorio, producido e incorporado en la causa, es la prueba que se va a ofrecer en el marco de la o las acciones que corresponda. A través de una acción preventiva de daños se puede lograr que se provea el agua en cantidad pero sobre todo en calidad que la población de la ciudad necesita. Otra acción posible es la de determinar qué cantidad de agua nos está proveyendo y qué cantidad es la que nos están cobrando. Nosotros hoy estamos pagando un cálculo que hace San Luis Agua de 1.400 litros por segundo por día y en las plantas no alcanzan a entrar 900 litros. Hay una diferencia sustancial en esto pero lo que más nos preocupa es la salubridad del agua, que ingresa, se trata y se distribuye a la población. Recordemos que las plantas fueron construidas específicamente para tratar y potabilizar un tipo determinado de agua. Al incorporarse otro tipo de agua con otros elementos o materiales distintos, resulta físicamente imposible tratarla”, concluyó Ignacio Campos.