LA DIFÍCIL DESPEDIDA DE RAQUEL CUANDO PARECE QUE SÓLO FUE UNA PESADILLA

Raquel Weinstock se fue rápido, demasiado, y no le dio tiempo al tiempo para acomodar sus pasos para tomar el envión que le diera la fortaleza necesaria  para avisar a tiempo, para tolerar semejante pérdida. Si hasta su partida se acomoda al carácter fuerte y bohemio de la escritora.

El fallecimiento de Raquel Weinstock golpeó fuerte a la cultura, a las letras, al periodismo, a quienes le conocieron, a sus amigos de toda la vida.

En esa línea de pesar, se anotó Syri Gettar Tarabay, quien dejó sus palabras de despedida para Raquel, fallecida el lunes pasado.

A Raquel Weinstock

-y a la manera de R.Weinstock-

Hay dolores sin rostro ...
Sin nombre ni origen...
Hay dolores que atraviesan la luz.
Y al propio dolor.
Hay dolores galopando ...desbocados.
Y otros que tapan la boca...apaciguan la ira...que se yo!
Hay dolores de dia y a obscuras
Y hasta en pleno solsticio...y con locura !
Hay dolores que se van .Y otros se quedan ..
O se vuelven piel.
Y encima...con perfume
a Nada !
Ni siquiera a dolor
como si no lo fuera...

Habra dolores que se extrañan ...?
O se beben...
O se bañan...?
O se engañan...

Hay Amigas .
Y Amigos .
Y dolores
que no alcanzan ...

Y amores que se cansan...
Y se alcanzan...
por añoranza...?

Y que se duermen
tambien !!


(Syri Gettar Tarabay)