(Por Eduardo Gargiulo).- El ex vice intendente de Villa Mercedes venía luchando contra un cargoso cáncer del que se había operado años atrás, pero que nuevamente se expandió en febrero pasado.
Este domingo su cuerpo dijo basta. Sus restos fueron enterrados en el cementerio parque “Jardín del Sol”, hoy lunes en horas del mediodía, con la presencia de un nutrido grupo de familiares y amigos que se acercaron para darle su último adiós.
“Quique” Rubiolo, como lo conocían todos, era productor agropecuario y se había acercado a la función pública de la mano de quien era uno de sus amigos, el entonces gobernador Adolfo Rodríguez Saá. Entre otros cargos, ejerció la administración de la Caja Social en Villa Mercedes.
Producto de esa misma amistad, en 1995 se le pidió que integrara la fórmula municipal, acompañando a Jorge Cangiano, siendo electo vice intendente en el período 1995-1999.
Años más tarde ocuparía otro cargo público, al ser designado delegado federal del Ministerio de Salud de la nación, durante los últimos años del gobierno kirchnerista.
Proclive al diálogo y al consenso, nunca le gustó la pelea entre los hermanos Rodríguez Saá. Como tampoco la que se produjo con el ex gobernador Claudio Poggi, por quien sentía un gran respeto.
Dueño de una gran simpatía y afabilidad, gustaba compartir largas tardes de café con sus amigos, durante las cuales analizaba la realidad nacional y la mechaba con interminables anécdotas y una pizca de humor. Quique se fue tranquilo con la vida que vivió. Su gran orgullo eran sus hijos y sus nietos, a los que tenía siempre presentes en su accionar.