(Por Eduardo Gargiulo).- Tanto en Villa Mercedes como en San Luis este jueves se realizaron sendas concentraciones para exigir justicia por el femicidio de Johana Galdeano, ocurrido el miércoles, por parte de quien era su pareja, el secretario General de UOCRA Juan Carlos Solalinde.
En Villa Mercedes la nutrida concentración fue en Plaza San Martín, a las 16:00 h, con mayoría de mujeres vistiendo prendas de colores oscuros y con pancartas repudiando el asesinato de la joven esposa del sindicalista, que murió por un shock hipovolémico luego de recibir tres disparos a quemarropa.
Solalinde conducía el poderoso gremio de la construcción, tras suceder a Daniel Herrera cuando éste murió imprevistamente tras un ataque al corazón.
En 2018 el ahora detenido se había desempeñado al frente del Programa de Relaciones Laborales del gobierno, motivo por el cual desde algunos sectores se aprovechó para vincular “políticamente” al oficialismo con el luctuoso episodio, criticando el accionar de la Secretaría de la Mujer que dirige Ayelén Mazzina.
Los manifestantes también se dirigieron hasta la sede gremial de UOCRA, donde pegaron en el frente volantes exigiendo justicia y condenando el femicidio. Posteriormente la marcha continuó hasta los tribunales, en la zona sur.
En tanto que San Luis la movilización fue menos numerosa y se concentró en Plaza Pringles.
DECLARACIÓN
Este jueves, la oficina de prensa de la Policía de San Luis comunicó que Johana Galdeano de 28 años y madre de un nene de 2 años, asesinada el miércoles a la siesta por su ex pareja, murió desangrada producto de los tres disparos que recibió por parte del agresor, Juan Carlos Solalinde.
El femicida por la tarde, cerca de las 18:00 h, fue citado a indagatoria por el juez del Crimen Leandro Estrada.
Según una fuente judicial citada por El Diario de la República, el agresor dijo que la víctima lo habría llamado varias veces por teléfono y que él le habría cortado luego de decirle que no lo molestara. Luego, ella se habría presentado en la casa de él con un cuchillo de cocina. Las fuentes judiciales confirmaron que en la mano la mujer tenía un elemento de este tipo.
El sindicalista admitió haber disparado, pero aseguró que efectuó un solo tiro, en dirección a los pies de la víctima, como para asustarla, y que luego se enteró que ella tenía más de una herida de arma de fuego.
Afirmó que luego de hacer ese disparo entró en shock, “se quedó en blanco” y que “no recuerda qué sucedió después”. La versión suena poco creíble, teniendo en cuenta que el mismo Solalinde posteriormente concurrió a entregarse y confesar el crímen en Comisaría Octava, donde además entregó el arma homicida.
Su defensa solicitó los ocho días de prórroga para diligencias y adjuntar pruebas en favor del detenido.
MOVIMIENTO EVITA
A la par de repudiar “enérgicamente el femicidio, de Johana Galdeano”, el Movimiento Evita reafirmó su “compromiso en la humanización y prevención de la violencia de género, en todas sus formas y aspectos”.
“Es la desigualdad entre nosotros, lo que a su vez genera discriminación, desprecio, prejuicios, falta de autonomía, oportunidades y un entorno propicio para la violencia física y emocional”, analizó en un comunicado, en el que además exigió “justicia y mayor compromiso de los poderes de Estado y sus organismos”.
(Apuntes de San Luis)