ACAMPE DE PROTESTA POR DESPIDOS EN UNA FÁBRICA

(Por Eduardo Gargiulo).- Un grupo de trabajadores despedidos y sus familias continúan protestando en el ingreso a la empresa Avex (ex Dánica), en el parque industrial sur de Villa Mercedes.

El conflicto se arrastra desde hace varios meses, pero estalló el viernes, cuando a un grupo de 32 operarios se les impidió el ingreso a la planta, de la firma Beltrán

El secretario general del Sindicato de Aceiteros, Juan Domínguez, reveló que la empresa despidió el viernes a más de 60 trabajadores, una parte de la planta que la firma posee en Lavalloll, Buenos Aires, y 32 de la fábrica en Villa Mercedes. En ambas empresas los empleados dispusieron la protesta en el ingreso a las plantas.

“Veníamos negociando por cuestiones salariales desde hace tres meses, cuando la firma compró la planta. Pero nos encontramos esta mañana con los despidos”, sostuvo Domínguez.

Ante esta situación los trabajadores decidieron  un acampe de protesta en el acceso a la planta en Villa Mercedes, por tiempo indeterminado.

Por su parte Domínguez adelantó que viajará a Buenos Aires para intentar revertir la medida y destrabar el conflicto, agregando que “la empresa despidió sin respetar la Ley de Contrato de Trabajo”.

“La firma aduce el despido de los 32 trabajadores está amparado en artículo 247 de la Ley de Contrato de Trabajo, pero para eso deberían haber presentado el proceso preventivo de crisis. Algo que no cumplieron”, advirtió.

Los operarios denuncian que los despidos forman parte de un plan más extenso de la compañía -que elabora margarinas, aceites desodorizados, mayonesas y aderezos- para limitar los derechos del convenio colectivo del Sindicato de Aceiteros. 

Los trabajadores de Lavallol habían presentado ya una denuncia contra la empresa, en manos del grupo Beltrán desde diciembre del año pasado, porque estaba abonando los sueldos de forma escalonada (cada quince días pero en dos cuotas). En el marco del proceso judicial, se celebraron dos audiencias. La última había sido el jueves, un día antes de que ejecutara sin mediar diálogo los despidos, que alcanzaron a trabajadores que tenían entre 15 y 27 años de antigüedad.